Las acciones cayeron el miércoles mientras los operadores miran hacia el final de un año con pérdidas y se preparan para 2023.
El Promedio Industrial Dow Jones perdió 365.85 puntos, o un 1.1%, terminando la sesión en 32,875.71. El S&P 500 cayó un 1.2%, llegando a 3,783. 22, y el Nasdaq Composite bajó un 1.35% a 10,213.29.
Apple pesó mucho en el Dow, ya que rompió un nivel clave y cayó a otro mínimo de 52 semanas.
El sector energético fue el más rezagado en el S&P 500 debido a la caída de los precios del petróleo. EQT, APA y Marathon Oil estuvieron entre los perdedores notables en el índice. Por otro lado, Southwest Airlines continuó cayendo a medida que la aerolínea continúa cancelando vuelos en medio de las severas condiciones climáticas invernales. Las acciones han caído más de un 5%.
"Las acciones finalmente alcanzaron el área verde simultáneamente, pero no se mantuvieron", dijo Louis Navellier, fundador y director de inversiones de la firma de inversiones de crecimiento Navellier & Associates. "Con un volumen bajo, el mercado está haciendo todo lo posible para mantener la cabeza a flote después de un comienzo decepcionante del mitin oficial de Santa Claus. Es un poco de reversión a la media, ya que los sectores más afectados están viendo algo de pesca de fondo".
"El mercado parece estar agotado, comprensiblemente, ya no espera un gran repunte técnico y solo espera llegar al viernes por la tarde sin más pérdidas significativas," agregó Navellier. "La mayoría de las principales incertidumbres del año; China y Covid, la guerra en Ucrania, los escasos suministros de energía y los bancos centrales agresivos, nos estarán esperando en el otro lado."
A medida que la última semana de negociación termina, el mercado de valores está en camino de su peor año desde 2008. El Nasdaq ha tenido el peor desempeño de los tres índices, perdiendo un 34.7% este año debido a que los inversores abandonaron las acciones de crecimiento en medio de los crecientes temores de recesión. El Dow y el S&P 500 están en camino de perder un 9.5% y un 20.6%, respectivamente.
Los datos económicos publicados el miércoles incluyeron las ventas de viviendas pendientes, que cayeron un 4.0% en noviembre sobre una base mensual, según la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios. La caída se produjo cuando las altas tasas hipotecarias asustaron a los posibles compradores. Los economistas encuestados por Dow Jones esperaban una caída del 1.8%.
"Hay señales claras de que la economía se está desacelerando, como lo demuestra hoy la caída de las ventas de viviendas pendientes al segundo nivel más bajo registrado", dijo Brian Levitt, estratega de mercado global de Invesco. "Las ventas de viviendas son históricamente un buen motor de la actividad económica, ya que la venta de una vivienda nueva respalda a muchas industrias. Al mismo tiempo, las tasas continúan subiendo, ya que la Fed aún señala una postura dura. En resumen, los inversores esperan un aterrizaje suave, pero los desafíos persisten."
Traducido por Jacqueline Mata
